El gobernador dijo que los casos sí van a la baja, pero las hospitalizaciones siguen al alza; anunció que Jalisco regresa al color naranja y confirmó que las clases presenciales siguen firmes para el 30 de agosto.
Este lunes, el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, dio a conocer el primer corte luego de casos de Covid-19 luego de 2 semanas desde que se anunciaron las restricciones de agosto.
De acuerdo al gobernador, el cierre de antros y bares en Jalisco, y la reducción de los horarios en restaurantes, repercutieron positivamente en la cadena de contagios, sin embargo, el avance es incipiente.
En cuanto a casos activos, hay una disminución de casi 700 personas, pues la semana pasada eran 10,392 personas con el virus activo y en esta semana recién concluida, bajó la cifra a 9,638.
En hospitalizaciones, al cifra sigue alta y en ascenso, pues la semana pasada eran 1,168 personas en nosocomios y para la semana recién finalizada la cifra creció hasta 1,355.
El gobernador señala que estos datos son una muestra ‘incipiente’ de los resultados que se han logrado de las restricciones y dijo que apela a la responsabilidad de la gente para que mejore la situación.
Señaló además que le informaron desde la Secretaría de Salud del Gobierno Federal que Jalisco regresó al color naranja en el semáforo de riesgos, aunque este se actualizará hasta el viernes.
También dijo que las clases presenciales siguen en pie para el 30 de agosto, pues los contagios en niños se incrementaron en las vacaciones de verano, debido a la falta de atención a las medidas sanitarias, pero que no hay indicadores que señalen que habrá repuntes al regresar a las aulas.
Estos resultados son insuficientes para declarar ‘exitosa’ la decisión tomada en la mesa de salud para el mes de agosto y, hasta hoy, los apoyos para los sectores afectados siguen sin aparecer.