La Secretaría de Seguridad Pública de Zacatecas confirmó en horas del mediodía de este sábado el trágico hallazgo de los cadáveres de los cinco policías municipales de Villa Hidalgo, quienes habían sido secuestrados hace dos semanas por un grupo armado.
El macabro descubrimiento tuvo lugar en las zonas de Jaltomate y Nigromante, ubicadas en el municipio de Pinos. Estos cinco oficiales, cuyas vidas hoy han sido arrebatadas, habían sido incorporados a la fuerza policial tan solo un mes atrás. Tres de ellos eran originarios de Durango y los otros dos de Coahuila.
Los cinco policías que habían sido privados de su libertad fueron encontrados sin vida, víctimas de una lluvia de balas, dispuestos uno encima del otro. El lugar fue acordonado y puesto a disposición de la Fiscalía General de Justicia de Zacatecas.
Se ha dado a conocer también que desde el jueves 3 de agosto, la SSPZ había designado a varios agentes estatales al mando de la comandancia de la policía municipal de Villa Hidalgo, en un intento por reforzar la seguridad en la zona.