“Se rasgan las vestiduras de manera hipócrita”, dijo AMLO sobre las reacciones de políticos y medios de comunicación de Estados Unidos tras el secuestro y muerte de los estadounidenses en Tamaulipas.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha denunciado la “hipocresía” y el “amarillismo” de los políticos y medios de comunicación de los Estados Unidos en relación al secuestro de cuatro ciudadanos estadounidenses en el estado de Tamaulipas, que tuvo lugar el pasado 3 de marzo. Dos de ellos fueron encontrados muertos este martes
En su conferencia de prensa, López Obrador afirmó que algunos políticos estadounidenses lamentan estos hechos, pero los utilizan con fines políticos y “trafican con el dolor humano”.
Las declaraciones del presidente se producen después de que el gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal, confirmara que las autoridades encontraron a los cuatro ciudadanos estadounidenses secuestrados en Matamoros. Dos de ellos murieron y otro resultó herido. Además, ya hay un detenido.
El FBI informó que los cuatro ciudadanos estadounidenses, que viajaban en un automóvil con matrícula de Carolina del Norte, sufrieron un ataque de un grupo armado poco después de cruzar la frontera hacia México.
López Obrador lamentó el suceso, pero criticó la forma en que los medios estadounidenses han cubierto el hecho de manera amarillista. También expresó su descontento por la falta de cobertura de la prensa estadounidense sobre el asesinato de mexicanos en Estados Unidos.
El presidente hizo hincapié en que este caso no es un tema que involucre a otros países, y afirmó que México no intervendrá en los asuntos internos de los Estados Unidos.
Finalmente, López Obrador evadió la pregunta directa de si había agentes del FBI trabajando en el caso en Tamaulipas y cuestionó a políticos republicanos como William Barr, quien acusó al presidente mexicano de proteger a los narcotraficantes y a los legisladores que buscan declarar a los cárteles mexicanos como terroristas. El mandatario concluyó diciendo que es hora de terminar con la hipocresía y prestar atención a los problemas en cada uno de los países.
