El pequeño, identificado como Fernando, fue secuestrado por una deuda de mil pesos que tenía la madre. Fue hallado una semana después en bolsas de plástico en una vecindad.
La desaparición de Fernando, un niño de 5 años con discapacidad, tuvo un trágico desenlace en el municipio de Los Reyes La Paz, Estado de México. Policías municipales hallaron su cuerpo dentro de bolsas negras en una vecindad de la colonia Ejidal del Pino. El menor fue asesinado presuntamente por una deuda de mil pesos que su madre no logró saldar.
De acuerdo con los reportes oficiales, el 28 de julio varios sujetos acudieron al domicilio de la víctima para exigir el pago de un préstamo. Al no recibir el dinero, los agresores —conocidos de la madre— decidieron llevarse a Fernando como garantía.
La mujer acudió posteriormente a una vecindad ubicada en la calle Carmen Serdán, donde sospechaba que tenían retenido a su hijo. Sin embargo, al no llevar el dinero, no se lo entregaron. Según su testimonio, intentó denunciar los hechos ante las autoridades municipales, pero no le dieron atención y la canalizaron al municipio de Nezahualcóyotl.
Fue hasta el 4 de agosto cuando logró presentar una denuncia formal en la agencia del Ministerio Público de Los Reyes La Paz, por privación ilegal de la libertad. En ese momento, agentes municipales la acompañaron al lugar donde creía que tenían a su hijo.
Al ingresar a la vecindad, los policías detectaron un olor fétido que provenía de varias bolsas negras. Al revisar el contenido, descubrieron los restos de Fernando en avanzado estado de descomposición.
Tras iniciar las investigaciones correspondientes, las autoridades detuvieron a dos hombres y una mujer, señalados como los presuntos prestamistas responsables del secuestro y asesinato del menor. Los tres fueron puestos a disposición del Ministerio Público y, en las próximas horas, serán ingresados al reclusorio de Nezahualcóyotl.
El caso ha generado indignación y exige una revisión urgente de los protocolos de atención en casos de desaparición de menores.
