Una mujer en Sevilla, España, ha sido arrestada y encarcelada por matar a su bebé de cuatro meses. La madre confesó haber asesinado al niño porque no paraba de llorar y estaba bajo los efectos del alcohol.

Una mujer ha sido detenida y puesta en prisión provisional por el asesinato de su hijo de cuatro meses. Según ha trascendido, la madre confesó haber asfixiado al bebé porque no paraba de llorar y se encontraba bajo los efectos del alcohol.

Los hechos ocurrieron a finales de julio en un piso del barrio de San Jerónimo, pero no fue hasta días después, tras la confesión de la madre, que se pudo esclarecer la causa de la muerte del menor. Inicialmente, la autopsia no había revelado signos evidentes de violencia, pero la confesión de la mujer y nuevas pruebas forenses permitieron determinar que el bebé había fallecido a causa de un hematoma subdural agudo y una hemorragia subaracnoidea, lesiones compatibles con un traumatismo craneoencefálico.

La madre, quien se encontraba sola con el bebé mientras su pareja trabajaba, llamó a su esposo al percatarse de que el niño no respondía. Sin embargo, fue una vecina quien alertó a los servicios de emergencia. El bebé fue trasladado al Hospital Virgen del Rocío, donde falleció.

Durante su declaración ante la Policía Nacional, la mujer admitió haber golpeado al bebé en la cabeza y posteriormente haberlo asfixiado. Además, confesó haber consumido una gran cantidad de alcohol antes de los hechos.