Las sopas instantáneas han sido durante mucho tiempo una elección popular y asequible para calmar el hambre al instante. Con solo calentar agua y esperar unos minutos en el microondas, se convierten en un placebo rápido para saciar el apetito.

Según la Profeco, México ocupa el segundo lugar en consumo de sopas instantáneas en América Latina, lo que podría tener repercusiones negativas en la salud de los mexicanos.

Aunque ninguna sopa instantánea es realmente saludable, existen opciones que son consideradas “mejores” que otras, incluso en comparación con la popular marca Maruchan, que recibió calificaciones no tan favorables por parte de la Profeco.

De acuerdo con el estudio realizado, una de las mejores alternativas es la Nissin Maxi Sopa, ya que cumple con lo que indica su etiqueta, contiene menos grasa y no se comercializa en recipientes de unicel, que son perjudiciales para la salud. Sin embargo, la Profeco advierte que la Nissin Maxi Sopa aún presenta exceso de grasas saturadas y sodio.

Por otro lado, la calificación de Maruchan no fue tan positiva, ya que no informa adecuadamente sobre sus componentes. Aunque asegura tener vegetales, solo contiene 4 g; además, su presentación en unicel libera químicos dañinos al calentarse en el microondas, y contiene glutamato monosódico, un ingrediente relacionado con problemas de salud.

La Profeco advierte que ninguna opción de sopa instantánea nutre realmente, y que el sabor que ofrecen proviene de sabores artificiales perjudiciales para la salud.