Director de la Clínica de Oncodermatología de la UNAM destacó que el virus se manifiesta en la piel siendo el órgano más grande del cuerpo.

El director de la Clínica de Oncodermatología de la UNAM Rodrigo Roldán destacó que se puede considerar como un “espejo” de lo que ocurre en el cuerpo, de ahí que ante la aparición de manchas, irritación o cambios de color, lo recomendable es mantener la higiene con jabón sin colorantes o perfume, la hidratación y protección solar.

“Estas son diversas, pueden ir desde piel seca, manchas, pápulas, ronchas, cambio de coloración a un tono azul en los dedos y la zona de las uñas, como una manifestación de que hay un problema circulatorio”, precisó.

Sin embargo se sabe que estas manifestaciones en la piel parecen estar relacionadas con el proceso inflamatorio que desencadena la infección por el virus, por lo cual se debe realizar un estudio que permita identificar elementos que lleven a una detección temprana de estas afecciones.

“El lavado es una medida crítica y esencial para tratar de disminuir el contagio y una medida útil es, inmediatamente después, aplicar crema sin perfumes”, agregó.

También dijo que respecto a las molestias que presentan algunas personas por el uso constante de los cubrebocas, recomendó utilizar uno de algodón que esté en contacto directo con la piel, y colocar encima uno de tipo comercial, Rodrigo Roldán dijo que se puede proteger la piel al evitar usar zacates o toallas fibrosas al bañarse, además de aplicar bloqueador solar, al menos dos veces al día.

Mencionó el registro que del 10 al 20 por ciento de pacientes afectados por este virus pueden presentar afecciones cutáneas.

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