Una joven de 23 años acudió al domicilio de su pareja tras no obtener respuesta a sus mensajes. Días antes, el joven le había expresado que estaba siendo víctima de un “trabajo de brujería” y mostraba signos de delirio de persecución.
Puerto Vallarta, Jalisco. La tarde del jueves, una llamada a los números de emergencia puso en alerta a las autoridades, quienes se trasladaron a un domicilio ubicado sobre la calle José Ortiz de Domínguez, entre Pedro Moreno y Álvaro Obregón, en la delegación de Ixtapa.
En la llamada, una mujer visiblemente afectada solicitó apoyo a los servicios médicos, señalando que su novio se encontraba sin vida al interior de su vivienda.
Elementos de la Policía Municipal de Puerto Vallarta, así como paramédicos de Protección Civil, acudieron de inmediato al lugar, donde se entrevistaron con una joven de 23 años que dijo ser la pareja del occiso.
Durante su declaración, la joven explicó que decidió acudir al domicilio tras perder contacto con su novio. Relató que días antes, él le había manifestado sentirse víctima de “brujería” y mostraba signos de paranoia, como la sensación de ser perseguido. También refirió que el joven consumía marihuana.
Agregó que, al no obtener respuesta al tocar la puerta, decidió ingresar a la vivienda brincando la barda. Al entrar, encontró el cuerpo de su novio suspendido de una soga, por lo que de inmediato llamó a los servicios de emergencia y a los familiares del fallecido.
Lamentablemente, al realizar la revisión de signos vitales, los paramédicos confirmaron que el joven ya no contaba con vida. El área fue acordonada para el levantamiento de indicios y la intervención del personal del Servicio Médico Forense.
Aunque todo apunta a un posible caso de suicidio, las autoridades realizarán las investigaciones correspondientes para esclarecer los hechos.