El huracán deja daños materiales en Isla del Bosque y en varias comunidades de Escuinapa; así como lluvias en Rosario y fuerte oleaje en Mazatlán
El huracán Willa, categoría 3, en la escala Saffir-Simpson, tocó tierra a las 19:00 horas en la localidad de Isla de Bosque, a 15 kilómetros al sur de Escuinapa, con vientos de 195 kilómetros por hora y rachas de 240 kilómetros por hora.
Los habitantes de la comunidad vivieron momentos de angustia al ver la fuerza del meteoro, el cual desató su poder.
Los embates de este fenómeno natural iniciaron desde las 16:00 horas con lluvias intermitentes y vientos que poco a poco fueron tomando fuerza hasta convertirse en rachas de viento de hasta 240 km/h que causaron severos daños en el municipio.
La Comisión Nacional del Agua (Conagua) resaltó que la muralla delantera del meteoro cubrió el sur de Sinaloa, afectando los municipios de Escuinapa, Rosario, así como el norte de Nayarit, en Tecuala y Acaponeta.
Además de dejar lluvias y fuertes vientos de Mazatlán, San Ignacio y Concordia, la autoridad recomienda mantenerse alerta, pues podría seguir lluvias y oleaje.
El servicio de energía eléctrica se dañó en el municipio de Escuinapa, pero entre la oscuridad se alcanzó a percibir los estragos que dejó Willa: decenas de árboles caídos, techos de lámina de cartón que volaron con la tempestad y bardas derribadas.
Los daños
El Hospital Integral de Escuinapa sufrió daños en una área del nosocomio generada por los fuertes vientos.
En los primeros recuentos por la colonia Pueblo Nuevo, la primaria Antonio Rosales registró severas afectaciones al desplomarse la extensa techumbre, así como el desprendimiento de los equipos de aires acondicionados.
El huracán Willa en el municipio de Rosario a su paso generó lluvias y fuertes vientos. La energía eléctrica falló en el cabecera municipal y en comunidades de los alrededores; así como árboles caídos en la zona de la Laguna del Iguanero.
Las mil 500 personas en los albergues se mantienen refugiadas ahí hasta que se levante la alerta, pues la autoridad asegura que será hasta esta mañana cuando vuelvan a sesionar los conejos de Protección Civil de los municipios del sur del estado de Sinaloa.
ÉCHALE UN OJO A: Albergues en Nayarit ante presencia de huracán Willa
Los embates
El coordinador de Protección, Carlos Mónico Guzmán Vázquez, del municipio de San Ignacio, recalcó que en Barras de Piaxtla se sintieron vientos moderados en la comunidad, y el mar presenta actividad inusual con olas de hasta tres metros, y no descartan lluvias durante la madrugada de este día.
Mientras que en el municipio de Concordia solo se registró lluvia durante la tarde.
Además, falló la energía eléctrica durante una hora y hubo varios apagones. Se habilitó un albergue, pero solo se atendió a dos familias. Hasta la noche de ayer no tuvo ningún reporte de daños.
En el municipio de Mazatlán, el huracán generó lluvias intermitentes, rachas de viento no permanente que generan un efecto de marea de tormenta con fuerte oleaje durante gran parte del día y de la noche.
El coordinador nacional de Protección Civil, Roberto de la Cruz Musalem, resaltó que la emergencia no termina tras el paso del huracán, ya que se puede presentar una segunda racha de fuertes vientos durante la madruga.
En medio de la amenaza, los amantes de los deportes extremos aprovecharon las condiciones climáticas que provoca el meteoro, pues se registraron olas de 5 a 8 metros.
Esto pese a que el coordinador nacional de Protección Civil, Ricardo de la Cruz, conminó a deportistas y ciudadanos a ser más responsables y no exponerse. Si ellos están en riesgo, detrás hay un rescatista que se expone.
La ciudadanía no tiene por qué estar en las calles, y menos frente a la playas para ver olas o tomarse una foto, pues esto los pone en peligro, advirtió. Pero, aun así, familias en lugar de estar en casa se fueron al malecón a ver el espectáculo que provoca el oleaje y tomarse la selfie.
Sacan la basura
A pesar del llamado que hizo la autoridad para mantener limpias las calles, en colonias inundables, como la Estero, la Juárez y la Olímpica, sus calles permanecían llenas de bolsas con basura.
Algunos vecinos referían que estaban esperando que las cuadrillas de aseo pasaran a recogerlas, ya que era día de recolección.
En las esquinas había tambos llenos de desechos, lo mismo que en las inmediaciones de los campos deportivos de la unidad deportiva Antonio Toledo Corro.
Incluso, frente a la base del Voluntario Cuerpo de Bomberos había depósitos saturados de basura que utiliza el personal de Aseo Urbano de la zona.
Cabe destacar que toda esa zona es una de las que mayor riesgo tiene de inundaciones, y las autoridades han advertido que la basura incrementa los riesgos.
Autoridades de los tres niveles trabajaron de manera conjunta para preservar la vida de los familias de los siete municipios que estuvieron en emergencia. (Con información de Debate)