A menos de un mes de que supuestamente la Línea 3 del Tren Ligero de Guadalajara debería estar operando, y después de que el propio gobierno estatal pidiera un plazo extra de 15 días después de la fecha anunciada del 15 de agosto, lo cierto es que en las estaciones no hay grandes cambios.

En un recorrido  en las estaciones Ávila Camacho, Plaza Patria y Circunvalación, pudimos constatar que en estas obras no existen modificaciones importantes, están cerradas pero adentro aún puede verse personal de la construcción.

Lo cierto es que desde hace meses las enormes columnas y lo que debería ser un parque lineal sólo han funcionado como lugar para los grafitis, depósito de basura y sitio de reunión de indigentes.

Y aunque sí fue posible percatarnos de las pruebas que realizan con los trenes vacíos, los propios vecinos dicen que es lo habitual, que pasen cada cierto tiempo, pero sin que ello signifique que vean cerca la posibilidad de que ya esté funcionando el sistema.

Hay que mencionar que al estar cerradas las estaciones, poco sabemos de los avances reales de este proyecto que ya costó más de 31 mil 500 millones de pesos y registra dos años de retraso.

Si en las estaciones elevadas es difícil percibir los avances, en donde son subterráneas, en el centro de Guadalajara es prácticamente imposible, y sólo se ve en las afueras de donde estarán los ingresos, cajas y montículos de material que supuestamente están utilizando en las obras.

Lo que sí se pudo percibir, en particular en la estación Ávila Camacho es que ya comienzan a instalar algunos árboles que le dan un aspecto más verde y bonito a esta infraestructura vial.

HAREMY REYES